Los drones militares despegarán de la Virgen del Camino pero la base de operaciones estará compartida entre Conde de Gazola y la Vírgen del Camino. En esta primera se realizarán los trabajos mecánicos, mientras que en la base aérea se realizarán los vuelos. De un cuerpo que contará con 140 militares, 90 ya están disponibles para esta labor. Se trata de prototipos de nueve metros de envergadura que alcanzan los 13.000 metros, siendo vitales en ciertas labores de identificación así como de extinción de incendios.
El hecho de que el espacio radioeléctrico de León esté lejos de cualquier problemática por elevado uso ha llevado al Ministerio de Defensa a inclinarse por el Aeropuerto de León como base para las operaciones de sus ‘drones’.
Los aviones no tripulados no son unos desconocidos para los leoneses. La Unidad de Aviones no tripulados UAV (PASI) del Grupo de Artillería de Información y Localización III/63 se encuentra situada en El Ferral del Bernesga, pero su operatividad se queda hoy reducida ante la necesidad de una logística más amplia. Dependiente del Regimiento de Inteligencia número 1 de Valencia esta unidad ha servido de ‘lanzadera’ para ‘atraer’ a León un polo logístico respecto a aviones no tripulados. Defensa cree que León atesora virtudes innegables para trasladar a León una parte de sus nuevos proyectos: la capital cuenta con un núcleo formativo en la propia Universidad de León, Pajares de los Oteros ha desarrollado un aeródromo que también ofrecerá formación y el Aeropuerto de León será el eje operativo para este tipo de aparatos no tripulados.
Defensa cuenta con una partida de 400.000 euros destinada a levantar el nuevo hangar para aviones no tripulados. Y en ese han «lo normal», según fuentes del propio Ejército, es que se sitúe uno o dos ‘Reaper’, el dron que España va a comprar a Estados Unidos. Se trata de aviones no tripulados de vigilancia y control, pero según los propios militares españoles son ‘fáciles’ de adaptar a situaciones de combate, por lo que no se descarta llegar a ese punto de operatividad.
La operativa para la puesta en marcha de la nueva base del Ejército destinada a aviones no tripulados en León permitiría que los primeros vuelos se desarrollaran a finales del próximo año, pero con la mirada puesta en 2017.
Será entonces cuando, según se advierte desde la propia Universidad de León, se podrá ver que León «puede ser puntera en este campo» porque entonces se complementará la inversión militar con un amplio proyecto de desarrollo para vuelos de carácter comercial y civil siempre en el campo de los ‘no tripulados’.